Como parte de su estrategia global de impulsar la transición energética y ser neutros en emisiones de CO2 en 2030, y al mismo tiempo ayudar a la descarbonización de la industria mexicana, Iberdrola México cuenta con una sólida cartera de proyectos renovables que será clave para el crecimiento de la compañía en los próximos años.
Tras el acuerdo alcanzado con México Infrastructure Partners (MIP), Iberdrola México ha reorientado sus negocios en el país, centrándose en las energías renovables y las soluciones de descarbonización para los clientes industriales.
“Se denomina cartera de proyectos a la agrupación de oportunidades de negocio que se pueden desarrollar a corto o mediano plazo”, explica Alfonso Campos, director del equipo de Desarrollo Renovable, quien precisa que Iberdrola México ya cuenta con más de 30 proyectos en cartera que suman unos 8.6 GW de capacidad y que se encuentran ubicados en 14 estados del país.
México cuenta con altos niveles de radiación y regiones con intensos y constantes vientos, pero además hay una demanda importante de energía por parte de la industria, en especial renovable.
“La demanda de energías limpias será clave para los años por venir. El nearshoring está reorganizando las cadenas de suministro”, detalla Campos, y añade que el sector industrial en México está buscando descarbonizar sus procesos.
Cartera renovable, ¿Cómo se construye?
El trabajo de equipo nunca se ha detenido en Iberdrola México y en los últimos años se desarrolló una metodología propia para evaluar las oportunidades de negocio que permite construir una cartera renovable flexible y de alta calidad, pensando siempre en las necesidades del cliente.
En la construcción de la cartera intervienen tres procesos: prospección, originación y cartera. El primero consiste en la búsqueda de oportunidades que cumplen con una serie de criterios mínimos para avanzar a la siguiente etapa. En la fase de originación se realiza una evaluación de los aspectos ambiental, social, técnico, económico y comercial de la oportunidad, y se diseña un plan de acción para incorporar el proyecto a cartera.
Una vez en cartera, los proyectos son priorizados pensando en la optimización de recursos, también se evalúa la posibilidad de hacer alianzas con otros desarrolladores para maximizar los resultados.
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Del proyecto a la acción
Contar con una sólida cartera de proyectos nos permite acelerar nuestro plan de crecimiento en energías renovables. “Nos estamos centrando en la realización de estudios de ingeniería, topografía y geotécnica. También estamos trabajando con la parte ambiental, la parte social e incluso los estudios de interconexión”, explica Campos.
Iberdrola México tiene futuro en el país gracias al esfuerzo constante de las diferentes áreas de la organización que miran hacia adelante y preparan a la compañía para una nueva etapa de crecimiento en la que prevé invertir 6,000 millones de dólares.
“Nuestra compañía se define con las palabras liderazgo y anticipación: nos adelantamos con las primeras renovables en el sector, después con la eólica marina y ahora innovando con el hidrógeno verde y las soluciones de descarbonización. Somos y debemos seguir siendo los líderes en energías renovables y transición energética”, destaca Alfonso Campos.
